13 de noviembre de 2008

SUBJETIVIDAD


Últimamente muchas de las conversaciones que mantengo con la gente me llevan una y otra vez a pensar en la subjetividad que mostramos a la hora de entender las cosas. Puede que a veces aceptemos que no tenemos razón, evidentemente no siempre la podemos tener por que sino seríamos una especie de dios o algo divino parecido, pero siempre la queremos tener o al menos siempre planteamos los temas desde nuestra visión del mundo, que a veces poco o nada tiene que ver con la visión de los demás. Personalmente, a menudo lucho por corregir mis errores y ser mejor persona, entender a los demás y no sentirme mal, culpable o reprimida; en algunas ocasiones me cuesta y me crea cierta ansiedad.
Lo importante aquí es cómo conseguir entender a los demás, sin que nuestros ideales mueran en el intento, sin que nuestros sentimientos vayan por libre y pensemos que sí, mientras sentimos que no. Hablo de interiorizar algo sólo en el plano racional, de entender una cuestión que alguien te plantea, pero entenderla únicamente con la cabeza, no con el corazón. Cuando pasa esto, y sentimientos y razón van por caminos distintos, sin duda se crea un conflicto interno en la persona, cuanto menos molesto. Y así estoy yo hoy, enfadada por mi visión sesgada del mundo, culpable por sentir cosas sin ningún sentido y triste por entenderte sólo en mi cabeza. Creo que todo se resume en una frase: El corazón tiene razones que la razón no entiende. Pero si algún día consigo entender las razones de mi corazón, creeme cuando te digo que serás el primero en saberlas.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Esta claro que cada persona tiene un interior diferente, hay personas que hacen más caso a su corazón y otras que sólo se apoyan en la razón, a veces el conflicto entre ambos es tan grande que sucede lo que creo que te está sucediendo a ti. Te conozco, se como eres, se lo que sientes, aunque a veces te cueste expresarlo, e incluso aunque a veces me cueste expresar que te entiendo, creo que después de algunos años me he vuelto más simple, cojo a mi mente y a mi corazón y les doy de la mano, y como un burro con orejeras, me dirijo hacia delante intentando disfrutar de mi vida, intentando crecer. Sé que no es fácil, por eso no quiero ponerme más obstáculos, tu presencia, tu compañía, tu amor hacer que todo esto sea mucho más fácil, todavía hay días que alucino contigo, a veces no me creo que puedas ser tan maravillosa, tan auténtica. Me entristece que estos conflictos te hagan sentir limitada, no lo voy a permitir. Así que siguiendo con mi simpleza, cosa que muchas veces has destacado de mi, solo te pido dos cosas, ya sabes cuales son. Y por encima de todo que me quieras. Por todo lo demás, sé feliz.

pнιl këvιn ] dijo...

La objetividad en el ser humano es imposible, porque el ambiente (social, cultural, historico) en que el hombre se ha creado condicionan su mirada del mundo.

Nosotros no tenemos un conocimiento real y acabado de los hechos, tenemos solo lo que vemos y construimos de los objetos que nos rodean. la realidad es una realidad construida por el hombre, heterogenea y cambiante.

Un saludo, ví tu blog en foro jovenes.

ZHEUS dijo...

en mi http://lagozheus.blogspot.com/
encontraras lo relativo de ser y del como

viva la subjetividad de vision o de gusto

estamos en un planeta que cada uno somos un mundo, "señores abran juego a los astros"

la escribir es libre espero que no nos hagan pagar por letras "SMS"

un saludo desde valencia
un abrazo tu subjetividad es decir a vos.

Xaquelina dijo...

Si todas las razones las entendiera el corazón todo sería más sencillo y no existiría esa complejidad de la vida que nos hace cuestionarnos y reflexionar sobre cosas como esta...la subjetividad.